Un total de 66 autoescuelas echaron el cierre en los 10 primeros meses del año pasado, en coincidencia con la huelga que llevaron a cabo los examinadores durante casi seis meses y que se desconvocó en diciembre. El número de exámenes de conducir, tanto teóricos como prácticos, también descendieron entre el 2016 y noviembre del 2017 un 20,3% por culpa, en parte, del paro de los examinadores. Hubo 376.079 pruebas menos.

Son datos que el Gobierno aportó en una respuesta parlamentaria a los diputados socialistas Miguel Ángel Heredia y Pablo Bellido, en los que se refleja que mientras que en enero del 2017 había registradas en la Dirección General de Tráfico (DGT) 6.056 autoescuelas, diez meses más tarde la cifra se redujo a 5.990.

PÉRDIDAS // Durante el tiempo que duró la huelga, las autoescuelas insistieron en la necesidad de diálogo entre examinadores y DGT, y llegaron a cifrar en 40 millones de euros las pérdidas económicas para el sector y en más de 170.000 los alumnos que no habían podido examinarse. Heredia calcula en 9.000 € por centro las pérdidas ocasionadas por los paros, a lo que habría que sumar el recorte en personal.