Javier Moliner lo tiene claro: quiere seguir siendo tras las elecciones de mayo presidente de la Diputación. Por esta razón, ya ha dado un paso al frente y ha anunciado que se postula para ser el candidato del Partido Popular a ocupar el despacho del Palacio de las Aulas otros cuatro años.
No es ninguna novedad porque es algo sabido por todos, pero sí que es la primera vez que lo anuncio públicamente. El dirigente explica que el cambio que fijó cuando asumió la presidencia en verano del 2011 “requiere de una continuidad”, y al respecto añade que está “en condiciones de seguir al frente de este proyecto”. Moliner apunta que a día de hoy tiene “fuerza y ánimo suficiente para seguir adelante con la tarea comenzada y el trabajo realizado, que no se basa en otra cosa que en intentar que la Diputación sea un instrumento útil para los castellonenses”. Moliner detalla que desde que asumió la presidencia provincial ha trabajado para trasladar a la realidad la nueva realidad de la provincia. “Hemos tenido que adaptarnos a la situación que vivimos y que nada tiene que ver con la de hace unos años. Había que redimensionar la institución a las necesidades que los castellonenses tienen en estos momentos, y eso es precisamente lo que hemos hecho y seguimos haciendo”, manifesta Moliner.
La intención del dirigente es cerrar la presente legislatura abriendo “aún más” las puertas de las Aulas, porque lo que busca su equipo de trabajo es “lograr que la Diputación sea más próxima y más transparente”.
El también presidente del PP provincial indica que busca liderar la salida de la crisis en la provincia. “Esta situación económica abre a la política unas posibilidades que no podemos desaprovechar como políticos, y es intención nuestra estar en primera fila, y afrontar estos tiempos”. H
