Los mosquitos no se irán con el final del periodo estival y el comienzo del curso escolar en la provincia. Los meteorólogos de la agencia oficial Aemet esperan que la tradicional temporada de lluvias, el otoño en Castellón, traiga este año más precipitaciones de lo normal, así como que las temperaturas sean igualmente más cálidas de lo habitual.

Calor por encima de 10 grados y agua son las dos condiciones que necesitan los mosquitos, incluido el tigre, para mantenerse activos y reproducirse, por lo que cabe esperar que las medidas que se están tomando ahora --básicamente fumigación, meramente paliativa-- tendrán que continuar en los próximos meses.

En el caso del mosquito tigre, del que están localizados al menos 71 focos en la provincia dentro del proyecto Atrapa el tigre, como informó ayer Mediterráneo, la situación será muy similar.

Desde la empresa Lokimica, encargada del control de la plaga en diversos municipios del litoral castellonense, Ricardo Acosta explica que “la alternancia de lluvias y calor que se ha producido este año aporta las condiciones óptimas para el desarrollo del mosquito tigre” e, indica, a partir de ahora, si en los próximos meses llega la habitual gota fría y más lluvias de lo normal, esas condiciones continuarán siendo las mismas y los mosquitos seguirán igualmente activos. “Todo dependerá de lo que llueva”, asevera el experto de Lokimica.

A la espera de la cumbre de implicados --ayuntamientos, Generalitat, diputaciones y universidad-- que prepara Sanidad para tratar de coordinar la lucha contra los insectos, los municipios persisten en los trabajos de fumigación de las zonas públicas. H