Los tópicos y los clichés a veces no reflejan la realidad, pero si se aborda la situación de la mujer en el mercado laboral son aplicables, aunque resulte preocupante en la necesidad de seguir avanzando en una sociedad igualitaria. En la provincia de Castellón, ellas ocupan los puestos de menor salario y peores condiciones. Son mayoría en sectores como la limpieza, las empleadas del hogar, el comercio, la hostelería o la manipulación de citrícos y en otros, que requieren cierta formación, como la sanidad o la educación. Sin duda, hay un espectro en el mercado laboral que se les resiste de forma frontal. Este es el de la industria. El transporte y la construcción también siguen siendo campos casi inalcanzables para ellas.

Las diferencias en el mercado laboral han entrado de lleno en la agenda política y social. Este asunto suele ser recurrente cuando se acerca el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, pero este año las reivindicaciones parecen llegar con más fuerza y concienciación. Los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, apuestan por un paro de dos horas como medida de protesta.

«El empleo femenino es el que cuenta con peores condiciones, porque se sigue arrastrando la creencia, que se tenía en los años 70 y 80, de que el salario de la mujer era una ayuda que complementaba al del hombre», explica el secretario general de UGT en Castellón, Francisco Sacacia.

Sectores «masculinizados»

En esta misma línea se manifiesta la secretaria de la Dona de CCOO en Castellón, Lidón Beltrán. La industria y la construcción que tienen un importante peso en la economía provincial son campos claramente «masculinizados», aunque existe cierta esperanza si se analiza el sector azulejero. «Cada vez hay más mujeres en fábricas cerámicas, como operarias, antes esto casi no se veía», explica Beltrán al respecto.

En el sentido contrario, la portavoz de CCOO apunta a que los hombres van ganando terreno en el comercio, especialmente, como dependientes en tiendas.

De todos modos, hay oficios que parecen seguir siendo de hombres. Si se tiene en cuenta el Informe del Mercado de Trabajo de Castellón del 2017, elaborado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. De los nuevos contratos realizados durante el ejercicio 2016 para camioneros, el 99,08% fueron hombres, y en el caso de los albañiles la cifra se situó en el 98,67%.

Conciliación

La falta de oportunidades por el simple hecho de ser una mujer o las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar están detrás de que las féminas no puedan seguir creciendo profesionalmente y atesorando una carrera profesional que les permita mejorar sus condiciones. Además, ellas son las que más contratos con horarios reducidos acumulan. Estos hechos tienen consecuencias a largo plazo, cuando llega la hora de la jubilación y se recuentan las cotizaciones para fijar la pensión.

«De las reducciones de jornada laboral, seguro que cerca de nueve de cada diez las cogen ellas, especialmente, esto ocurre por un tema cultural», lamenta Beltrán. Y es que las féminas siguen siendo las que se ocupan, en gran medida, del cuidado de los hijos y los mayores. «Una mujer igual preparada que un hombre ve muchas veces como su carrera profesional se paraliza, lo que supone una clara desventaja», explica el secretario de UGT.