El drástico balance que hacen los empresarios de negocios situados en las inmediaciones de la N-340 se transforma en oportunidades para los que están junto a la autovía CV-10, que reciben a los cerca de 2.000 camiones que la nueva medida del Gobierno desvía de la nacional. Ruina para unos y auge para otros.

El negocio se traslada. Pocos días han bastado para hacerlo patente. Anteayer, el primer día laboral tras la Pascua en el que estaba vigente la prohibición de circular a los camiones de más de 7,5 toneladas por la nacional entre Nules y Orpesa, los empresarios de la Plataforma de Damnificados por la N-340, que regentan establecimientos de Torreblanca y Cabanes, auguraban el cierre por la rotunda merma de clientes. Una clientela que “desborda” a sus compañeros de la autovía.

“El trabajo se ha triplicado en los últimos días y nos ha obligado a convocar una reunión de urgencia para organizarnos”, explica el gerente del complejo San Lázaro, José Luis Selma. “No damos abasto. Hemos tenido que abrir el buffet también por la noche para las cenas y vamos a ampliar el párking para poder dar cabida a cerca de 400 camiones”. “Damos servicio de restaurante durante las 24 horas, y servicio de ducha, y no descartamos en un futuro ofrecer también pernoctaciones, sobre todo cara a la apertura del aeropuerto”, apunta. Además, van a ampliar la plantilla.

vida // También han notado el incremento de chóferes los propietarios del restaurante Navarrete, situado en el polígono industrial de Cabanes. “Con la crisis iba mermando la clientela, pero desde esta semana se nota el aumento del tráfico por la autovía”, aseguran sus propietarios, Javier y Eliseo. “Esta medida nos dará vida a todos los negocios de la autovía”, reconocen. A estos dos de restauración se suma un tercero, también en Cabanes, junto a una nueva gasolinera. “Abrimos en noviembre con la idea de que estuviera operativo el aeropuerto y terminada la autovía y todavía no lo están. Estos días hemos notado más afluencia de gente y esperamos continuar así”, asegura el empresario Alberto Madrid.

Además de los tres negocios de restauración y de la gasolinera de Cabanes, hay otra gasolinera en la Pobla. Son los únicos negocios de la CV-10 a su paso por Castellón y, si las perspectivas siguen igual, no serán los únicos.

MÁS PRESIÓN // Por otra parte, los miembros de la Plataforma de Damnificados de la N-340, que representa a más de 60 negocios y unas 1.000 familias, acudirán al pleno del Ayuntamiento de Torreblanca de esta tarde para mostrar su desacuerdo con la restricción del tráfico tal y como está concebida y apoyar la moción que se prevé aprobar. En esta, se insta a la Administración central a la liberalización parcial de la AP-7 en el tramo entre Sagunto y Orpesa para los vehículos de más de 7,5 toneladas o una bonificación del 50% para los transportistas. H