La "Plataforma No a la MAT de Castellón" solicita a la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo que paralice la nueva línea de muy alta tensión la Plana-Morella, en una sesión en la que se acordó esperar a que el Ejecutivo comunitario se pronuncie sobre el proyecto para volver a analizarlo de nuevo.

El proyecto, incluido en la Planificación Energética 2015-2020 elaborada por el Gobierno central en colaboración con las comunidades autónomas, prevé construir un línea de doble circuito de 400 kV y 86 kilómetros que conectaría la subestación de Morella con la de la Plana.

La ponente de la petición en la sede parlamentaria, Clara Eugenia Ros, calificó el proyecto de "cicatriz en el territorio" que "no es de utilidad pública" y supone un "atentado contra la naturaleza (...) y los ciudadanos", que "beneficia exclusivamente al promotor".

Ros subrayó que ya hay una tendido eléctrico que discurre en paralelo y señaló que el nuevo proyecto, que se ha "fragmentado para facilitar su aprobación", "no contempla el desmantelamiento de la línea ya existente".

La petición recibió el respaldo expreso de varios eurodiputados, entre ellos la valenciana Marina Albiol, portavoz de la delegación de La Izquierda Plural en la Eurocámara, quien indicó que la utilidad pública del proyecto es "cuestionable" y solicitó que se paralice el nuevo tendido porque afecta a las aves silvestres, a los hábitats animales y a la Red Natura 2000.

En esa línea, el eurodiputado de EQUO Florent Marcellesi recordó que el Gobierno de la Comunitat Valenciana se opone al proyecto y exigió "una evaluación del impacto ambiental estratégico" de todo el proyecto, mientras que Josep-Maria Terricabras, del grupo de Los Verdes, secundó la petición y señaló que "el caso de las eléctricas españolas acabará saliendo en los libros del terror de Europa".

Por su parte, la europarlamentaria de Alianza de los Demócratas y Liberales por Europa Beatriz Becerra pidió que se aplique el "principio de precaución" ante los riesgos medioambientales y sanitarios que alegan los detractores del proyecto, y la socialista Soledad Cabezón instó a que se estudiase si la construcción de la línea se había publicitado adecuadamente entre la ciudadanía.

El funcionario Daniel Fernández Gómez explicó que la Comisión Europea (CE) solicitó información a las autoridades españolas en dos ocasiones y que, tras haberla recibido, el Ejecutivo comunitario se pronunciará en breve sobre el caso.

De ese modo, la eurodiputada popular Rosa Estaràs Ferragut, miembro de la Comisión de Peticiones, se pronunció a favor de esperar a que la CE se pronuncie y volver a analizar entonces la solicitud, extremo que aceptó la presidenta de esa comisión parlamentaria, la liberal Cecilia Wikstrom.

Según explicó Red Eléctrica en un comunicado difundido el pasado septiembre, el tendido en el que planea invertir 47,5 millones de euros incrementará la seguridad y calidad del suministro eléctrico en la Comunitat Valenciana y hará que el sistema eléctrico sea más eficiente, seguro y sostenible. EFE