Les Normes de Castelló son ya, por derecho propio, bien de interés cultural inmaterial tras publicarse ayer el correspondiente decreto del Con-

sell en el Boletín Oficial del Estado, en cuyo texto se subraya la importancia que supuso para la sociedad valenciana el consenso lingüístico surgido en 1932, que permitió afrontar la modernización y pervivencia de la lengua valenciana. Los elementos que forman parte de los bienes protegidos se refieren, entre otros, a los mecanoscritos de ocho páginas titulados Bases para la unificación de la ortografía valenciana o la casa Martí Matutano, sede de las reuniones cívicas de sus promotores.