Los nutricionistas lo tienen claro. Es necesario que la Conselleria de Sanidad implante nuevas políticas para frenar el aumento de la obesidad y concienciar a los ciudadanos de los problemas en la salud que conlleva tener kilos de más. Los expertos alertan de que el 23% de la población es obesa, mientras que el 38% sufre sobrepeso. En los más pequeños las cifras también son «preocupantes» si se tiene en cuenta que uno de cada cuatro niños padece sobrepeso y un 15% obesidad.

La presidenta del Colegio Oficial de Dietistas y Nutricionistas de la Comunitat Valenciana, Alma Palau, remarca que faltan políticas «para prevenir la obesidad y la más necesaria es la regulación de la industria alimentaria». En la tarea de la concienciación, Palau explica que los colegios «tienen una gran labor educativa, pero los propios maestros no poseen conocimientos básicos de alimentación, así que hay que empezar por ahí. Lo que se echa en falta es que exista una política alimentaria bien argumentada y estructurada desde la Conselleria de Educación, cuya responsabilidad no es solo la enseñanza sino también el propio comedor escolar». Las asignaturas pendientes de este servicio siguen siendo, según la propia Alma Palau, ofrecer más producto de temporada y de proximidad, y menos carne y pescado que está procesado.

En esta misma línea, se manifiesta la castellonense Pilar Esquer, experta en nutrición. «Hacen falta otras políticas y hay que regular la publicidad y la industria alimentaria. Hay que legislar a favor de la salud», indica, al tiempo que pone el énfasis en la preocupación que genera la obesidad infantil. «Cuando vemos encuestas, algunos padres no son conscientes de que sus hijos tienen sobrepeso. Los niños tienen acceso a la comida rápida todos los días y si pueden elegir ingerirán antes un bollo que una manzana, deben conocer las hortalizas y verduras para comerlas».

Como consejos para mejorar la alimentación, Esquer propone «volver a la cocina, comer en familia y comprar productos frescos y de temporada».