Los sismógrafos han detectado un nuevo terremoto de 1,8 grados en la escala de Richter en las proximidades del almacén submarino de gas natural Castor, situado frente a la costa de Vinaròs. Se trata de un nuevo movimiento que se suma a los más de 500 que se han registrado ya en esta zona desde que se iniciara la inyección de gas en el subsuelo. Ahora la plataforma se encuentra cerrada de forma cautelar desde hace más de medio año.

El seísmo se originó a las 20.43 horas del lunes y se registró a una profundidad de unos 9 kilómetros, según datos del Instituto Geográfico Nacional, entidad que depende directamente del Ministerio de Fomento.

El proyecto Castor, con una inversión de 1.200 millones de euros, trata de aprovechar un antiguo pozo petrolífero a 1.750 metros de profundidad bajo el nivel del mar. Los expertos consideran que la inyección de gas está detrás de la oleada de seísmos que se han producido en la zona.

Mientras los terremotos se siguen sucediendo en toda la zona de Vinaròs, el Ministerio de Industria y Energía sigue guardando silencio y no se pronuncia al respecto de si cerrará definitivamente la instalaciones por el peligro que conllevan o las reabrirá atendiendo a las peticiones y presiones de la empresa propietaria Escal UGS. Ayer mismo desde la cartera del ministro José Manuel Soria aseguraron que no hay ninguna novedad al respecto.

INFORMES // De momento, el Ministerio espera conocer el contenido de varios informes pedidos a expertos internacionales para que se pronuncie sobre el riesgo sísmico que supone la inyección de gas en la plataforma. Una documentación que únicamente ayuda a alargar la decisión final.

Este nuevo seísmo del pasado lunes no hace más que refrendar la opinión de los expertos y deja en evidencia al empresario Florentino Pérez, accionista mayoritario de Escal UGS, quien hace un mes negó la crisis sísmica generada por el almacén de gas Castor. Los alcaldes de las localidades más cercanas ya criticaron entonces el “cinismo” que exhibió Pérez al tratar un tema que generó tanta intranquilidad en la zona. H