Las peñas taurinas no piensan quedarse con los brazos cruzados, después de la que directora general de À Punt, Empar Marco, asociara, en Les Corts, los toros embolados con «el maltrato animal» y justificara así el hecho de que esta modalidad, así como las corridas de toros, no tendrán cabida en la futura televisión pública valenciana. La Federación de Peñas Taurinas de Bous al Carrer de la Comunitat ya ha reclamado a Marco que rectifique y estudia querellarse por dichas declaraciones, pero va más allá y ha hecho públicas las conclusiones de tres estudios realizados por veterinarios, y profesores de universidad que avalan que el animal no sufre daños en la embolada.

Los informes están firmados por los veterinarios Javier Monzón, Dani Machancoses y Vicente Soriano. Son la baza de las peñas para reclamar a Marco que cambie de opinión. Además, en breve se prevé conocer el resultado del informe encargado por la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias a una veterinaria de la universidad CEU Cardenal Herrera sobre los posibles efectos de las bolas de fuego en los ojos del toro, aunque sus conclusiones se antojan similares a las puestas de manifiesto por estos tres estudios.

La federación sostiene que los profesionales reconocen que la transferencia de calor de la bola en llamas al cuerpo del animal es «prácticamente nula y en ningún caso les provoca quemaduras a los toros». De igual modo, subrayan que las lesiones observadas por los veterinarios al final del espectáculo van a la baja y se detectan un 0’29% de lesiones graves en los más de 1.000 espectáculos taurinos analizados entre los años 2010 y 2017.