La Unió de Llauradors advierte de que el anuncio del Ministerio de Agricultura de retirar la ayuda a la superficie de los frutos secos (almendra y algarroba) supondría para los productores de la Comunitat dejar de percibir unos 600.000 euros al año, «y se quedarán sin ayudas y sin reestructuración». La Unió informa de que el cultivo, importante como complemento de rentas para los agricultores del interior de Castellón, está situado en zonas de secano con escasas alternativas, por lo que su eliminación significará, «aparte del quebranto económico, un mayor abandono de parcelas, menor calidad paisajística, más riesgo de incendios y proliferación descontrolada de fauna perjudicial», detalla.