La plaga que mata a los pinos está presente ya en puntos de todas las comarcas castellonenses, con 40 poblaciones en las que se han detectado ejemplares secos como consecuencia de tres tipos de insectos perforadores que han visto favorecida su proliferación debido a la “extrema sequía” que padecemos, tal y como señala la orden de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, que declara, desde ayer mismo, obligatorio el tratamiento contra el Tomicus, Orthotomicus e Ips sexdentatus.

A tenor del texto publicado por el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV), las zonas en las que se debe actuar de forma prioritaria han crecido en la provincia de Castellón de forma exponencial en poco más de un mes. De hecho, a finales de septiembre eran apenas nueve los municipios en los que Medio Ambiente consideraba necesario el trabajo de prevención y la tala de árboles muertos, incluida la capital, con unos 100 árboles secos en el paraje de la Magdalena.

Sin embargo, la orden que entra hoy en vigor cifra en 40 los municipios en los que hay focos de la plaga. Se trata, además, de una suerte de red que se entrecruza en todo el territorio provincial, desde Alcalà de Xivert y Santa Magdalena de Pulpis hasta Almenara, pasando por Morella, Onda, Llucena, Sant Joan de Moró, Segorbe o la Vall d’Uixó.

también orpesa // Se echa de menos, sin embargo, la inclusión en el listado --reproducido del DOGV en esta misma página-- de la población de Orpesa, una de las primeras que acusó el pasado verano la presencia del insecto, lo que llevó ya en su momento a la corta de los pinos afectados en el entorno del Castillo.

Hace escasos días, desde el Ayuntamiento informaron a Mediterráneo de que ya se estaba trabajando con propietarios de urbanizaciones como las de El Balcón, en las que se habían detectado ejemplares secos, para tomar las medidas oportunas.

Mientras, el Ayuntamiento de Castellón informó ayer de que continúa el proceso de licitar los trabajos de tala del centenar de ejemplares que está previsto cortar en la Magdalena. La estimación de Conselleria es que serán al menos 500 en la provincia.

El texto legal emitido por la Conselleria declara, por un lado, la “existencia de las plagas de insectos perforadores de la familia de los ecotílidos (Tomicus destruens, Orthotomicus erosus e Ips sexdentatus)” en los pinares de los mencionados 40 municipios castellonenses, 52 de la provincia de Valencia y ocho de Alicante.

Por otra parte, establece “de utilidad pública y obligatorio el tratamiento para el control de las plagas de los insectos perforadores que afectan a los pinares en la campaña 2014/2015”, una acción que tendrán que llevar a cabo los propietarios de los ejemplares enfermos. La mayor parte de los titulares serán ayuntamientos y propietarios privados, a los que Medio Ambiente asesorará sobre cómo actuar, señala la orden.

El texto legal de la Conselleria abunda en este sentido al indicar que “los tratamientos obligatorios consistirán en la corta y descortezado o extracción del monte de los pies muertos o afectados con riesgo fitosanitario”, mientras que “no será obligatoria, aunque sí aconsejable la colocación de trampas con feromonas para la captura de insectos adultos”.

calendario oficial // La orden de Medio Ambiente especifica que la tala y retirada de los árboles enfermos debe hacerse antes de que emerja la siguiente generación de insectos. Por esto, los árboles afectados entre septiembre y diciembre deben cortarse antes del 15 de marzo del 2015, mientras que la fecha tope para los infectados en el primer trimestre está fijada en el 15 de mayo. H