La presidenta del PP en la Comunitat, Isabel Bonig, presidió la última reunión del año de la junta local del PP junto a los miembros de la dirección popular encabezados por su presidenta, Begoña Carrasco. En su intervención, Carrasco aseguró que «cada vez son más los castellonenses que se sienten defraudados con el bipartito y piensan que el único partido que garantiza el crecimiento y el futuro es el PP». «A través de las visitas y reuniones que mantenemos a diario con asociaciones de vecinos y distintos colectivos representantes del tejido social y económico de Castellón estamos constatando el hartazgo de los ciudadanos», detalló. Para la presidenta popular, «la alcaldesa socialista y su gobierno independentista y radical no ha sido capaz de solucionar los problemas que más preocupan a los ciudadanos. Ni los desahucios, ni la limpieza, ni el empleo… no ha cumplido nada de lo que prometió y los castellonenses se están dando cuenta». Uno de los ejemplos de «los innumerables fiascos de la izquierda es el nuevo Plan General de Ordenación Urbana», dijo.

Un discurso que reforzó a través de un comunicado, en el que mantuvo que «el PGOU es a día de hoy un papel que no gusta a nadie». «El primer anuncio ha tenido como respuesta un aluvión de quejas vecinales. No gusta a la Marjalería, ni a Crèmor, ni a Maestría». «El día 21 se lleva al pleno el primer trámite de un proceso que se avecina largo».