El ejecutivo local del PP y los tres grupos de la oposición --PSPV, Compromís y EU-- pactaron ayer que cualquier cargo político municipal en Castellón que resulte imputado en el futuro por un caso de corrupción sea apartado inmediatamente de todas sus responsabilidades hasta que haya una eventual sentencia firme. Los ediles perderían sus competencias de gobierno pero asistirían a los plenos y a las comisiones.

Según aseguró el portavoz municipal del PP, Juan José Pérez Macián, “el acuerdo no es firme sino que está a expensas de que la secretaria municipal redacte en las próximas semanas el informe definitivo sobre la viabilidad de la propuesta”. Gobierno y oposición dieron ayer, en el seno de la comisión extraordinaria sobre transparencia, otro paso más para alcanzar el acuerdo. La negociación se alarga desde verano.

El principio de acuerdo, según Macián, reserva una cláusula especial para el alcalde, que también cedería cautelarmente sus funciones al vicealcalde excepto en los aspectos que la ley prohíbe delegar: su voto de calidad en el pleno, la jefatura de la Policía Local o su absoluta autonomía para nombrar a los tenientes de alcalde, entre otros muchos ejemplos.

Los representantes de los cuatro grupos negociarán en la próxima reunión qué se entiende por caso de corrupción para acotar el alcance real y los límites de ese acuerdo, según Macián.

Por su parte la portavoz adjunta municipal del PSPV, Patricia Puerta, recordó que su formación era partidaria de exigir a cualquier edil imputado la entrega de su acta a la apertura de juicio oral, pero han “cedido porque era la única manera de alcanzar un acuerdo con el PP, que pedía exigir esa dimisión tras la emisión de la sentencia de condena”.

El portavoz de Compromís, Enric Nomdedéu, salió “muy satisfecho” del paso dado porque, en esencia, todos asumen “que los imputados deben ser apartados”.

Su homóloga de EU, Carmen Carreras, reiteró que su formación defiende la entrega del acta en el mismo momento de la imputación porque los políticos deben “ser ejemplarizantes”, pero han “cedido para no romper un pacto muy necesario”. H