Los titulados de Magisterio de la UJI de la promoción del 2014 protestaron con pancartas instantes antes de iniciar el examen de capacitación lingüística del valenciano al que les ha obligado la Universitat Jaume I.

Hicieron la prueba, pero quisieron visibilizar su malestar ante una situación considerada, de entrada, como “agravio comparativo” con los titulados de Valencia y Alicante, cuyas universidades les ha validado su automática capacitación tras realizar la carrera en esta lengua. Mientras, la UJI sigue dando la callada por respuesta y la Conselleria de Educación reitera su voluntad de diálogo para resolver el conflicto. H