El PSPV-PSOE ha denunciado «la constante utilización del fenómeno de la despoblación que está realizando la Diputación de Castellón, con su presidente Javier Moliner al frente, para hacerse la foto con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en lugar de promover y ejecutar verdaderas políticas que eviten la desaparición de los municipios de interior».

El diputado socialista y alcalde de Forcall, Santiago Pérez, considera «una burla decir que la inversión contra la despoblación para este año será de 30 millones de euros, cuando la realidad es que la mayoría de actuaciones que se especifican no redundan en mantener ni en asentar la población, sino que son inversiones, como el servicio de prevención de incendios, que supone 9,1 millones de euros o los 12,1 millones previstos en el plan 135».

Para el diputado socialista, la inversión real en intervenciones dirigidas a favorecer el mantenimiento de la población apenas alcanza el millón de euros, lo que supone menos del 1% del presupuesto para el 2017. «Un dato que demuestra la ineficacia de las actuaciones en este sentido», explica Pérez, quien reclama diversas actuaciones, como un auténtico servicio de transporte público, ayudas al comercio, a la ganadería, a la agricultura o al aprovechamiento forestal para generar empleo, además de reducir la presión fiscal a los vecinos y empresas de las zonas rurales.