PortCastelló ya tiene prácticamente la vía libre para conectar en tren las dos dársenas. Con la publicación en el BOE de la aprobación de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente de la Declaración de Impacto Ambiental de los dos proyectos en que se divide la obra --que el presidente de la Autoridad Portuaria, Francisco Toledo, anunció en estas páginas el domingo--, a la entidad tan solo le resta «el informe preceptivo de Puertos del Estado» para poder licitar la nueva infraestructura.

Esto es un mero trámite, dado que Puertos del Estado ya ha dado su visto bueno al Plan de inversiones de PortCastelló, e incluso aportará financiación a la obra, a través de su Plan de accesibilidad marítimo terrestre. Así las cosas, las previsiones que maneja la Autoridad Portuaria es licitar la actuación «antes de que concluya este año», adjudicarla y comenzarla «en el 2018» y que la infraestructura esté acabada «y disponible en el 2020», apuntó Toledo a Mediterráneo ayer.

Por ello, no es de extrañar que el máximo dirigente de los muelles provinciales exhibiese su «alegría por disponer del trámite ambiental, que permitirá licitar el proyecto por 17 millones de euros», a los que hay que sumar el IVA. También el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, mostró su satisfacción, dado que el tren interno permitirá «aumentar la competitividad de las empresas que operen a través de PortCastelló».

LAS OBRAS

La declaración de impacto, cuya aprobación se ha prolongado durante más de año y medio en Madrid, recoge la necesidad de esta conexión dado que «el centro de la actividad portuaria se está desplazando hacia el sur». Este tren interno --de una vía en ancho mixto, es decir, con tres carriles-- conectará con el acceso sur y permitirá dejar sin uso el norte actual, que atraviesa el núcleo poblacional del Grao.

Entre las 12 alternativas propuestas --«algunas muy similares entre ellas», señala el documento-- se ha seleccionado la 9, que contempla una estación de clasificación con una zona de acopio de contenedores, en la que habrá una doble vía y accesos para camiones. La vía se desplazará hacia el norte adosada a la escollera del dique de poniente (que se ampliará) y cruzará a la dársena norte mediante dos puentes retráctiles que, cuando estén recogidos, dejarán dos bocanas de 50 metros de anchura para el paso de los buques pesqueros y también los de recreo hacia sus respectivas zonas de atraque.

Entre las medidas correctoras a la fauna, se prevé paralizar las obras desde el 1 de abril hasta alrededor del 15 de julio para permitir la cría de las 4.000 parejas de gaviota de Audouin que nidifican en la dársena sur, «la mayor colonia del mundo».