Despido de trabajadores, pérdida de importancia de unidades de alto valor añadido como la de medicina deportiva, obras prometidas cuyos plazos se incumplen… Las polémicas que hacen referencia al Hospital Provincial se acumulan en los últimos meses, así como las críticas a la gestión de la consellera de Sanidad, Carmen Montón.

El último episodio afecta a la construcción de un nuevo edificio de oncología que debe convertir al consorcio de Castellón en una «referencia» en la materia. Ese es el objetivo que figura en el proyecto integral con el que la consellera presentó sus objetivos de legislatura para el centro. No obstante, a la hora de la verdad los términos no se cumplen y falta concreción sobre cómo se abordarán los trabajos que restan pendientes.

Siete meses de demora en los trabajos del sótano

Tras seis años de parón, las obras que deben convertir el sótano del nuevo edificio en un espacio especializado en la detección y el tratamiento de tumores se reanudaron en junio del 2016. En aquel momento, el gerente del consorcio, Joaquín Sanchís, y la directora territorial de Sanidad en Castellón, Azucena Martí, afirmaron que el periodo de ejecución de las obras, que también incluían el cerramiento de la fachada y la azotea del inmueble, eran de nueve meses. No obstante, en el mes de marzo el sótano todavía no era una realidad, ni tampoco en verano, como se anunció después. Aunque las obras están entregadas, los problemas vinculados a los dispositivos que deben dar servicio en esta zona concreta todavía no han permitido ponerla en funcionamiento.

Problemas técnicos y falta de permisos legales

Los dos equipamientos más importantes que albergará el sótano son el acelerador lineal y la cámara hiperbárica. En el primer caso, fuentes de la Conselleria han indicado a Mediterráneo que está pendiente de la licencia del Consejo de Energía Nuclear (CEN). Asimismo, el departamento autonómico asegura que los técnicos que se encargarán de utilizar esta tecnología, que permite destruir células cancerosas a los afectados por tumores, están aún realizando una formación que terminarán en las próximas dos semanas. Será entonces cuando comience a dar servicio a pacientes.

De cumplirse estos pronósticos, el dispositivo, que ha costado 3,3 millones de euros al hospital, entraría en funcionamiento un año después de lo previsto, pues fue la propia Montón la que dijo en un consejo de gobierno del consorcio, en noviembre del 2015, que la máquina se podría utilizar en doce meses.

El caso de la cámara hiperbárica es, si cabe, más sorprendente, puesto que fue adquirida por los responsables del hospital hace seis años y aún no ha sido utilizada. Sanidad informó de que la próxima semana acudirán al centro técnicos de la empresa alemana a la que se adjudicó su puesta en marcha para programarla.

En el subterráneo de la zona oncológica también estará el nuevo PET TAC, que está previsto que entre en funcionamiento el próximo mes de diciembre, mientras que la gamma cámara se instalará a principios del 2018.

Una segunda fase que todavía está en pañales

Pero el serial de la zona oncológica del Provincial no terminará con la puesta en marcha de estos nuevos equipamientos. Y es que ya en 2016, tanto Montón como los responsables del consorcio aseguraron que el proyecto contaba con una segunda fase que se ejecutaría si existía disponibilidad presupuestaria. Así, la primera y la segunda planta del inmueble albergarán un hospital de día y unas consultas externas especializadas en cánceres que sustituirán al aulario y el salón de actos previstos inicialmente.

Pese a que la fachada, en cuya remodelación se han utilizado piezas cerámicas, da la sensación de que la obra está totalmente acabada, una visión de cerca permite observar que estas dos alturas presentan aún un aspecto completamente diáfano.

Pero, pasado casi un año y medio desde ese primer anuncio genérico, poco más se sabe de esta obra, que debe convertir al Provincial en una referencia provincial a nivel oncológico. Sanidad informó de que en estos momentos se está preparando «el expediente administrativo para proceder a la licitación del proyecto». Es decir, que todavía habría que realizar este trámite, aguardar a que el beneficiario del concurso prepare el plan de obras para, posteriormente, realizar otra licitación de los trabajos a la que ya se podrían presentar las empresas constructoras.

Dudas sobre su viabilidad durante esta legislatura

Según consta en el proyecto integral para el Hospital Provincial que presentó la Conselleria al principio del actual mandato, el 2019 estaba prevista una inversión de 1,5 millones de euros para esta segunda fase.

No obstante, los retrasos que acumula el proyecto, unido a la falta de concreción de Montón, hacen temer que el objetivo de que el edificio entero esté en marcha cuando acabe la legislatura --en mayo del 2019-- sea ya a estas alturas de difícil cumplimiento. Y es que, tal y como denuncian los sindicatos, la realidad choca con los anuncios y las promesas de Montón.