Motoristas y alcaldes alertan de la peligrosidad de la CV-195, que une Jérica y Zucaina, en la que el domingo falleció un motociclista. Los fines de semana, esta ruta es muy transitada por moteros de Valencia y Castellón. Hasta revistas de tirada nacional la recomiendan como ruta motera por su sinuoso discurrir. "El problema fundamental es que tiene buen pavimento, que, unido a las fuertes pendientes, hacen la carretera muy golosa de pilotar, pero el asfalto no está en sintonía con la muy deficiente señalización de las curvas, que en algunos casos son supercerradísimas, hay que tomarlas casi parado", explica Manuel Roche. Este motorista ya sufrió una caída en dicha vía y recuerda que una persona de asistencia en carretera dijo que todos los fines de semana sacaban entre seis y ocho motos de las cunetas. Según él, la combinación de buen asfalto y malas curvas es "explosiva", pues provoca una confianza letal.

Al igual que él, Gaizka Garamendia, alerta de la existencia de guardarraíles que se convierten para los aficionados en una cuchilla de afeitar mortal.

Pero Esquerra Unida ha advertido de que algunos motoristas han convertido estas vías en sus circuitos particulares casi con total impunidad. Alcaldes de la comarca han expresado su preocupación, ya que una minoría de los motoristas que frecuentan tanto esta carretera como la que une Onda con Montanejos, "se pasan un montón", y pidieron más vigilancia. Con todo, el alcalde de Caudiel, Isidro Esteban, aplaudió la presencia de moteros que anima el turismo de interior.