Solo 900.000 euros. Esta es la cuantía que la Conselleria de Sanidad ha previsto dentro del presupuesto del Hospital Provincial de Castellón para este año con el objetivo de redactar y ejecutar el proyecto de la segunda fase del edificio oncológico. Una cantidad que se presume escasa si se tiene en cuenta que el propio gerente del centro, Joaquín Sanchís, confiaba el pasado noviembre en que la mayoría de la inversión prevista para este año, que finalmente asciende a 5,3 millones, sería para poder avanzar en esta importante actuación que acumula un considerable retraso.

Las previsiones de Sanchís eran retomar las obras a mitad de este año para que la primera y segunda planta, que albergarán un hospital de día, despachos y dependencias de investigación, estuvieran operativas en el 2019. Para cumplir estos plazos, el proceso debería no sufrir ningún tipo de dilación, como ha ocurrido hasta ahora. Además cuenta con el hándicap de que el presupuesto para este ejercicio no llega al millón de euros, pese a ser una intervención de envergadura.

La actuación está ahora paralizada debido, según la Conselleria de Sanidad, a que se decidió variar el uso inicial planteado por el anterior equipo directivo en estas dependencias, ideadas para ser aulario de una universidad privada. Actualmente, la fachada del inmueble se encuentra totalmente acabada, pero por dentro solo existen pilares.

Equipamiento // Con la puesta en marcha del nuevo acelerador lineal el pasado mes de diciembre se abrió una parte del sótano, donde también se ubicará el nuevo PET-TAC, la cámara hiperbárica y la cámara gamma, unos aparatos de avanzada tecnología cuya puesta en marcha está prevista este año. Estas dependencias están concluidas, a falta de acondicionar las dos plantas superiores. En las cuentas hay una partida 95.000 euros para la adecuación y puesta en funcionamiento de la cámara hiperbárica, que lleva años en el centro sin ser empleada al no completar la tramitación requerida para ello.

El plan de inversiones también contempla 600.000 euros para la ampliación de Urgencias y creación de las instalaciones de la Unidad de Conductas Adictivas y 640.000 euros para equipos que sustituirán a los de mayor obsolescencia, entre otros.