La unión de sequía y temporales deja un balance «desastroso» del 2016 en el campo de Castellón, que registra una de las mayores cifras de pérdidas de los últimos años, alcanzando los 150 millones de euros, sobre todo en el sector citrícola, que, todavía en campaña, ha sido uno de los más afectados. Es la valoración anual de la Unió de Llauradors, que ayer fijó en más de 91 millones solo las pérdidas en las más de 32.000 hectáreas afectadas por las lluvias de diciembre, fundamentalmente del periodo comprendido entre el 16 y el 19, «el más grave del 2016», calificaron.

De estos 91 millones, 70,5 millones corresponden a cítricos, más de 13 millones a hortalizas, 7,5 millones al sector del olivar, y unos 500.000 a caquis.

En el campo valenciano, la Unió de Llauradors estima que las pérdidas del último año rondan los 700 millones; 320 directas del último temporal de lluvias fuertes y continuadas con inundaciones en algunas zonas, acompañado de viento e incluso pedrisco. A esta cuantía habría que sumar pérdidas indirectas.

Este temporal afectó a más de 140.000 hectáreas de cultivo en en el conjunto de la Comunitat. El que arrastra un mayor número de pérdidas es el de los cítricos, con más de 201 millones de euros; seguido de las hortalizas, con 70,4 millones; el caqui, con 21,7; el olivar, con 20,5; o la uva de mesa, con 3,8 millones.

A esta cifra hay que sumar la cantidad de más de 250 millones de euros estimada ya en su día por la Unió por los efectos de la grave sequía y la de otras adversidades climatológicas -como por ejemplo para no retroceder demasiado el pedrisco de finales de septiembre que causó pérdidas de unos 12 millones-, lo que ha provocado que el 2016 sea «nefasto» para los agricultores de la Comunitat Valenciana.

AYUDAS // La Unió de Llauradors indicó que tanto el Gobierno de España como la Generalitat valenciana han reaccionado rápidamente anunciando una línea de ayudas, aunque dirigidas a la reparación de las infraestructuras fuertemente afectadas por los temporales, pero no se ha establecido ninguna medida para compensar directamente a los agricultores y ganaderos.

En este sentido, reclaman desde esta organización agraria apoyo para que todos los afectados puedan recuperar su capacidad productiva, que se ha visto gravemente afectada por los daños que han sufrido en sus explotaciones, pues ya se avanza una elevada pérdida de renta.