El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, busca vías para tratar de evitar la huelga de estibadores que está previsto que comience el viernes tras las dos suspensiones previas. Ayer, De la Serna ofreció a los sindicatos y las empresas regular su hipotético acuerdo mediante «algún instrumento de carácter normativo». Eso sí, especificó que esta norma no será el real decreto ley que aprobó el Consejo de Ministros y que llevará el jueves al Congreso.
La noticia puede interpretarse como una cesión ante los sindicatos, que han pedido a Fomento que el acuerdo al que puedan llegar con las empresas tenga rango de ley para garantizar su cumplimiento. Pero no responde del todo a esta exigencia, ya que los estibadores pretenden que se incluya en el real decreto, ya que entienden que puede hacerse. De hecho, han señalado en repetidas ocasiones que no retirarán la amenaza de huelga hasta que Fomento acepte negociar el real decreto o este sea definitivamente tumbado en el Congreso. Desde Coordinadora, el principal sindicato portuario, pidieron ayer más concreción al ministro.
ayuda // La cesión de Fomento llega después de que ya aceptase ayudar económicamente a las empresas para que estas garanticen los actuales puestos de trabajo. Además, es un nuevo intento para tratar de obtener apoyo del resto de grupos en el debate parlamentario, algo que parece muy lejano. De hecho, De la Serna, tras confirmar que el trámite parlamentario tendrá lugar el jueves, hizo un llamamiento «a la responsabilidad» del resto de grupos políticos para que voten a favor del real decreto ley. «No existen razones» para lo contrario, dijo, «si lo que quieren es la estabilidad en el empleo».
Todo, a la espera de ese posible acuerdo, hacia el que no se avanzará esta semana. Mañana solo habrá una reunión técnica.
