La junta de gobierno del Ayuntamiento de Castellón ratificó ayer la ejecución de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, en relación al cese de la venta y suministro de alcohol en las calles Barracas e Isaac Peral, a partir de las 22.00 horas, para aplicarla «la semana después de la Magdalena». La portavoz del equipo de gobierno, Verònica Ruiz, puso fecha así a la entrada en vigor del fallo, el 27 de marzo; inmediatamente después de la semana grande de Castellón, durante la que las tascas, al igual que el resto de negocios de restauración y de ocio, disfrutarán de un horario especial, más ampliado del habitual.

Respecto a la forma de hacer cumplir la sentencia que restringe el consumo de alcohol en las tascas, a partir de las 22.00 horas, al interior de los locales, los veladores o las terrazas, la portavoz del gobierno municipal reconoció la complejidad que entraña y aseguró que lo harán «de la forma menos agresiva posible».

Ruiz también hizo alusión a la reunión mantenida esta semana entre representantes de las tascas y de la asociación Castelló Sense Soroll --cuya denuncia motivó la última sentencia del TSJCV-- con los concejales Rafa Simó e Ignasi Garcia como mediadores. Aunque sin avances, el encuentro fue cordial entre las partes.

PENDIENTES DEL SUPREMO // A la espera de ejecutar esta última sentencia, el Ayuntamiento de Castellón está pendiente del Tribunal Supremo, al que recurrió un fallo del TSJCV que declaraba ilegal el reconocimiento de la singularidad en las tascas que permite beber en la calle. Hoy por hoy no tienen aún una respuesta.