El programa de Teleayuda Domiciliaria de la Diputación de Castellón, que cuenta este año con un presupuesto total de 242.700 euros, atiende ya a un total de 2.518 usuarios procedentes de 122 municipios de la provincia. Este servicio, a cargo del departamento que dirige la diputada de Acción Social, Elena Vicente-Ruiz, se encuentra actualmente en una fase de expansión con la incorporación de 500 nuevos equipos por un importe de 50.000 euros.

Este sistema de teleayuda está dirigido a atender a aquellos vecinos residentes en los 134 municipios adscritos a este programa y que, por razón de su edad, enfermedad o por tener alguna discapacidad física o sensorial, necesitan de estos servicios para no ver alterada su rutina diaria y poder ser atendido sin que tengan que abandonar su vivienda habitual.

MUY ÚTIL // «La teleayuda es, sobre todo, una herramienta útil a la hora de combatir la despoblación en el interior de la provincia», tal y como señala la diputada responsable del área de Acción Social, quien explica que este programa permite atender a los mayores que viven en zonas rurales aisladas, que estas personas no tengan que abandonar sus domicilios y puedan disfrutar en sus propias casas del cuidado necesario «sin que esto le suponga renunciar a su bienestar, independencia y autonomía personal», según señala Vicente-Ruiz.

«Tenemos la obligación de estar al lado de los más vulnerables cuando lo necesiten y allá donde vivan», asevera la diputada provincial, quien destaca el compromiso del gobierno que preside Javier Moliner a la hora de atender las necesidades de los grupos más vulnerables de la población.

Este servicio dispone de una red asistencial que cubre la totalidad de la provincia, «lo que permite atender de forma continuada y directa a aquellas personas que más lo necesitan, con atención especial a las personas que viven en los entornos rurales y alejados de los grandes núcleos de población», según añade la responsable del departamento de Acción Social.