La Dirección General de Tráfico ha iniciado esta semana una campaña especial de vigilancia en la que controlará más de 4.000 vehículos que tiene como objetivo reducir la siniestralidad en las vías convencionales, donde se produce el 90% de las víctimas mortales en la provincia de Castellón.

De este modo, en lo que va de año han perdido la vida 19 personas en las carreteras de la provincia de Castellón. De ellas, 17 han muerto en viales que tienen un carril por cada sentido de circulación, según recuerda la Jefatura Provincial de Tráfico.

La campaña especial, que se prolongará hasta este domingo, fue presentada ayer por el delegado del Gobierno, Serafín Castellano. En la anterior campaña fueron controlados un total de 4.676 vehículos en la provincia de Castellón y se impusieron un total de 523 denuncias.

La iniciativa es de vigilancia en las carreteras convencionales, lo cual comprende todas las infracciones que se puedan cometer en este tipo de vías y no solo las de exceso de velocidad. Así, en la campaña, como expuso ayer Castellano, “se controlará por parte de la Asociación de Tráfico de la Guardia Civil, además del exceso de velocidad, los adelantamientos indebidos, la ingesta de alcohol o drogas, el uso del casco y sistemas de retención, utilización del teléfono móvil durante la conducción, así como de auriculares, manipulación de navegadores o cualquier otro elemento que pueda producir distracción”.

Además de la vigilancia a pie de carretera también se efectuará por el aire a través de los helicópteros Pegasus. En lo que va de año, la Jefatura Provincial de Tráfico (hasta el 31 de agosto) ha puesto 49.784 denuncias. De ellas, 30.996 han sido por exceso de velocidad, 1.682 por no llevar puesto el cinturón de seguridad, 1.236 por utilizar el teléfono móvil al volante y 933 por ponerse a conducir bajo la influencia de las drogas y también del alcohol.

N-340 // La N-340 también se considera como carretera convencional y, por tanto, será objeto de vigilancia por parte de los agentes de la Agrupación de Tráfico.

De hecho, en lo que va de año han perdido la vida en la N-340 un total de 11 personas. El accidente más grave se produjo el 15 de agosto, en el que perdieron la vida cinco magrebís al chocar el vehículo en el que viajaban contra un camión. Entre 2009 y 2013 un total de 68 personas han perdido la vida en esta carretera.

Solo dos de las 19 víctimas de este año fallecieron en autopistas y autovías en la provincia. Así, en la A-23 perdió la vida el 16 de mayo una persona al chocar un camión y un coche en Jérica y en la AP-7 en Cabanes el 2 de agosto en una salida de vía. H