Tras una semana de acusaciones cruzadas y de amenaza de adelanto electoral, los dos partidos que lideran el Botànic, PSPV y Compromís, han bajado los decibelios a la espera de una reunión que pueda poner fin a la mayor crisis en sus más de tres años al frente del Consell. Una calma --al menos aparente-- que ayer rompió su aliado externo, Podem, que reclama un encuentro lo «antes posible» entre los tres partidos debido al «clima de desconfianza y confrontación» en el Consell.

Fue a través de su secretario general, Antonio Estañ, quien justificó la convocatoria de la comisión de seguimiento del pacto de gobierno para así demostrar que está «a prueba de bombas». Estañ, que habló tras la ejecutiva de Podem, coincide con PSPV y

Compromís en considerar que «a día de hoy» no ve motivos para adelantar las elecciones, porque «queda muchísimo por hacer»; pero que en cualquier caso, el adelanto debería abordarse «conjuntamente» entre los tres partidos del Pacto del Botànic.

En la reunión, que considera «preferible» que se realice antes del debate de política general del 11 de septiembre --mismo plazo marcado por el presidente de Les Corts y de Compromís, Enric Morera--, Estañ pidió desarrollar «una hoja de ruta conjunta» en la que el Consell se blinde «ante ese contexto en clave partidista».

Por su parte, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, dibujaba un panorama de armonía bien distinto al que ella misma puso en escena durante la pasada semana, con las serias polémicas sobre la senda de déficit y las comisarías de violencia de género. Donde antes había «falta de comunicación» y unilateralidad por parte del PSPV, ayer había «armonía» y la «solidaridad que siempre» caracteriza al Botànic. Oltra destacó que no pudo coincidir con Ximo Puig en Morella, pero que ya habrá «ocasión».

a la espera // Desde las filas socialistas, en oposición, se ha impuesto el silencio. Fuentes del PSPV consultadas por Mediterráneo señalan que todavía no hay una fecha prevista para una reunión y que no se va a entrar en una guerra de declaraciones.

Asimismo, siguen defendiendo el sí a la senda del déficit negociado por el conseller de Hacienda, Vicente Soler, tras obtener 850 millones para la Comunitat.