Las buenas perspectivas que desde el sector turístico provincial se dibujaban cara a este verano se están viendo cumplidas, e incluso superadas, cuando se ha alcanzado ya el ecuador de la época vacacional. Y es que este mes de julio ha sido el mejor de los últimos cinco años, mejorando las cifras del año pasado, y en agosto se prevé llegar a niveles de ocupación que llevarán prácticamente a colgar el cartel de completo.

Son los datos que maneja la patronal turística de Castellón, Ashotur, desde donde se estiman incrementos del 5% respecto al año pasado. “Ha sido un mes de julio muy bueno, mejorando un 2014 que ya había sido positivo. Para agosto tenemos un nivel de reservas muy importante y todavía faltan las que llegarán de última hora”, manifiesta el presidente de Ashotur, Carlos Escorihuela.

Un mes en el que la ocupación llegará en algunas localidades al “97 ó al 98%, sin posibilidades apenas para crecer más”. Dentro del buen comportamiento general del turismo en Castellón sobresale, principalmente, Peñíscola, un destino que ha destacado “por su oferta de cama y sus precios de venta, que además se está consolidando”. Escorihuela también destaca las buenas cifras de Marina d’Or, que está atrayendo “mucho turismo familiar”.

Así, y aún a falta de cifras oficiales, parece que se van a cumplir las previsiones del vicepresidente provincial de Turismo, Andrés Martínez, quien auguraba unos “datos muy positivos”.

En cuanto al perfil de turista en el litoral castellonense, como es tradicional, es mayoritariamente nacional, “un mercado que se comporta muy bien”, señala el presidente de Ashotur. Respecto al visitante internacional, máximo reto del sector, se ha notado “un pequeño incremento en las llegadas”. Los países emisores son sobre todo Francia, Alemania y los Países Bajos, por este orden.

ESPERANDO A LOS AVIONES // Desde la propia patronal insisten, por otro lado, en que la puesta en marcha del aeropuerto permitirá explotar un mercado hasta ahora muy poco presente en tierras castellonenses: el inglés.

No es, sin embargo, el único país a nivel internacional en el que han puesto sus ojos los empresarios turísticos provinciales. “Hemos notado la llegada de menos rusos, sobre todo por los problemas con su moneda, pero seguimos peleando por tener nuestra cuota”, afirma.

La pasada temporada estival, Castellón recibió 812.004 turistas, un 8,01% más que durante el verano del año 2013. H