El año 2012 ha sido bueno para el Grupo UBE, la multinacional química japonesa cuya sede para Europa y Latinoamérica está en el polígono del Serrallo de Castellón. Tal es así que la compañía cerró el pasado ejercicio con un volumen récord de facturación de “435 millones de euros de ventas consolidadas”, lo que se tradujo en un beneficio después de impuestos de 10 millones de euros. A pesar de todo, el resultado final contrasta con los 23 millones de euros del 2011, una caída significativa que ha estado motivada por “los elevados costes pagados por sus materias primas en los mercados internacionales y la fuerte competencia de los países emergentes, un ejercicio difícil en el que el grupo ha continuado haciendo un importante esfuerzo inversor en la planta de Castellón, pese a la reducción general de los márgenes comerciales”.

Fue a grandes pinceladas el balance que la compañía ofreció a los medios de comunicación, en una cita que también sirvió para presentar en sociedad, de manera formal, al nuevo consejero delegado de UBE Corporation Europe SA, Masahito Nojima, tras la jubilación de su antecesor en el cargo, Ricardo López Soria.

En este sentido, en el pasado 2012, UBE invirtió 11 millones de euros, “completando sus nuevas unidades productivas de química fina y fertilizantes”, incorporando “mejoras ambientales y de eficiencia energética de la planta de fabricación” y activando “la plataforma logística en PortCastelló”. Los 11 millones forman parte del plan de 56 millones de inversiones que UBE ha previsto entre 2013 y 2015, lo que arroja un saldo acumulado de 277 millones de euros desde 1994.

Ahora, la compañía se encuentra centrada en poder aumentar en 10.000 Tm/año la capacidad de producción y la competitividad de sus instalaciones de nylon, con productos muy especializados y avanzados tecnológicamente para el sector de la automoción y también el filme transparente para alimentación. H