El consejo de gobierno de la Universitat Jaume I (UJI) aprobó ayer las cuentas anuales de la universidad correspondientes al ejercicio 2013 con un presupuesto definitivo de 119.618.449 euros, logrando un remanente de 8.164.350,69 euros. Así, la UJI consigue ahorrar esta cantidad a pesar de arrastrar los impagos del Consell, que ascienden a más de 100 millones de euros, 20 de ellos correspondientes a la deuda a corto plazo y 82 de la llamada deuda histórica.
La universidad pública castellonenses destinará este ahorro presupuestario obtenido en el periodo 2010-2013 a afrontar a corto y medio plazo la incertidumbre financiera, teniendo en cuenta la sustancial reducción de las transferencias recibidas de la Generalitat, que configuran alrededor del 75% de los ingresos ordinarios de la universidad.
Otro de los apartados, el de gastos, pone de relevancia que la UJI va al día en los pagos a los proveedores. Las obligaciones reconocidas ascienden a 99.770.717 euros y los pagos se han situado en 94.845.140 euros, una cifra que representa un grado de pagos del 95% de las obligaciones.
Como consecuencia del importante esfuerzo de saneamiento presupuestario realizado por toda la comunidad universitaria y formalizado en los correspondientes Planes Económico-Financieros de Reequilibrio desde el año 2010, en el 2012 la magnitud del remanente de tesorería fue de 3.674.944,48 euros y en el 2013 se ha conseguido situar en los 8.164.350,69 euros actuales.
ENTIDADES SANEADAS // Por otro lado, el consejo de gobierno aprobó las cuentas anuales del año pasado de las entidades dependientes de la Universitat Jaume I: Fundación General, Parque Tecnológico Empresarial de la UJI, L’Àgora Universitaria S.L., Fundación Germà Colón y Fundación Isonomia.
Todas ellas cerraron el año pasado sin pérdidas y algunas de estas entidades lograron ahorros importantes. H
