Una investigación impulsada por el grupo de Neuroanatomía Funcional (NeuroFun) de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universitat Jaume I de Castellón (UJI) ha demostrado que la hormona prolactina y los lactógenos placentarios

--hormonas parecidas a la prolactina producidas por la placenta-- actúan sobre el cerebro durante la gestación y cambian comportamientos en la función mental de la madre, como agresividad y motivación para cuidar a las crías.

La investigación y sus conclusiones se han publicado en la revista Brain Structure and Function, según informaron ayer fuentes de la Universitat Jaume I.

El hallazgo científico del equipo de investigadores, liderados por el catedrático de Biología Celular Ferran Martínez-García, revela que la agresividad maternal «no es producida por la interacción entre la madre y las crías, como se pensaba, sino por las hormonas que actúan sobre el cerebro antes del parto».

Además de aportar luz sobre la neurobiología del comportamiento maternal, este tipo de estudios promovido por el grupo de trabajo de la UJI «tiene mucho interés y una posible aplicabilidad futura», como es profundizar en la expresión de conductas instintivas que conllevan una fuerte carga emocional como, por ejemplo, son los distintos comportamientos sociales.