El anuncio del concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó, de eliminar el suelo urbanizable de la Marjaleria en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana se ha traducido en preocupación para los vecinos de la zona. Si bien respiran con tranquilidad por la promesa de que se respetarán todas las casas, piden «igualdad de condiciones para las viviendas», que «todas estén consolidadas, en suelo urbano y con los mismos servicios básicos».

«Las que estén en suelo no urbanizable, por lo menos, que se considere urbano el terreno construido, y el resto de la parcela que sea rústica, si hace falta». «Lo que no puede ser es que entre dos vecinos, uno tenga una casa en suelo urbano y otro en suelo rústico, y que todos vivamos en la Marjaleria». «¿Por qué unos sí y otros no?» En estos términos se pronuncia el presidente de la Asociación de Vecinos de La Plana En Trilles, Jorge Beguer, quien anuncia que asociaciones como el Meridiano, La Coloma o Camí Fondo irán de la mano para reclamar este cambio al Ayuntamiento. Una modificación «que creemos posible, dada la buena voluntad mostrada por Simó de hacer un plan para la Marjal «acorde al entorno y escuchando a todas las partes».

«Queremos que las viviendas se queden consolidadas y poder acondicionarlas, sin aumentar la volumetría», apunta el presidente de la Asociación de Vecinos Camí Fondo, Manuel Ferrara. Además, solicita «poder construir casas de aperos. Que haya un control, que se sigan las normas, pero que podamos construir estos espacios en nuestras parcelas», insiste. Una demanda que coincide con la del presidente de La Coloma, Pascual Martínez. No obstante, en base al borrador del Plan General, solo se permitirán nuevas construcciones en las parcelas urbanas que estén sin edificar, y con condiciones.

Más tajantes son desde Unión por la Marjaleria, para los que el nuevo planeamiento «elimina directamente el suelo urbanizable y con ello las expectativas de desarrollo generadas en muchos de nosotros. Dicen que van a respetar lo que ya existe y que van a permitir obras de conservación y mejora. Sin embargo, lo que tenemos son multas, órdenes de derribo y penas de cárcel».

La idea, según detalló el edil en la reunión con los vecinos del pasado sábado, es eliminar el suelo urbanizable previsto en el Plan Especial de la Marjaleria aprobado en 2006, pasando a no urbanizable, con varios tipos de protección. El citado plan calificaba como urbanizables 268 hectáreas de las 785 en total que ocupa la zona de la Marjaleria, un 34%. El suelo urbano ocupa, en base al mismo documento, 244 hectáreas, un 31% del total. El resto era no urbanizable y zona verde.

OTRAS DEMANDAS // Por otra parte, los vecinos de la Marjaleria, en especial los de Camí Fondo, reclamaron en el encuentro con los técnicos y políticos infraestructuras que eviten las inundaciones. «No puede ser que estemos cuatro días inundados, como nos ha pasado ahora. Es urgente que se actúe para mejorar las evacuaciones del agua de lluvia».

Desde a Asociación de Vecinos de la Marjaleria, aseguran que están estudiando toda la información arrojada sobre el futuro de la Marjal para pronunciarse.