Les Penyes en Festes volvieron en la madrugada del sábado a la explanada de la avenida Agricultor, después de ocho años utilizando ubicaciones alternativas, por lo que el tradicional sorteo de cadafales, con el que se anuncia la llegada de la semana grande, tuvo una connotación muy especial.

Los peñistas cumplieron con la costumbre de reunirse una semana antes de que se dispare el chupinazo para, con la excusa de saber cuál será su ubicación en la plaza portátil del Mercado, disfrutar de un aperitivo de lo que les espera durante siete días que se anuncian como muy intensos.

SOLAR ACONDICIONADO

Los participantes en el acto tuvieron la oportunidad de comprobar que ya está todo listo para que empiecen a instalar sus respectivas carpas, después de que el Ayuntamiento de la Vall haya adecuado la zona con la colocación de los puntos de luz y agua, así como el montaje de los escenarios.

El concejal de Fiestas, Lluís Diago, celebró el regreso de les Penyes a la que todos los implicados consideran que es su ubicación idónea, por orientación y seguridad; y a su vez recordó que este mismo espacio acogerá el 30 de julio el concierto de Rozalén, patrocinado por el consistorio.

De este modo, la ciudad ya está lista para sumirse en esta convocatoria. La semana pasada ya se realizó la instalación del vallado de seguridad para los encierros, y las peñas ya han desempolvado sus coloridas vestimentas. Por lo que solo falta que el próximo sábado, desde las 18.00 horas, se dispare el esperado xupinasso.