Especialistas en el área de la producción y las operaciones industriales se dieron cita ayer en una jornada organizada por Ascer para mostrar las líneas básicas que deben seguir las empresas del sector para adaptarse, en las mejores condiciones, a las exigencias que requiere la implantación de las tecnologías digitales en las diferentes fábricas y, con ello, la automatización de los procesos.

Este salto, que se conoce como industria 4.0, ya lo han dado unas cinco empresas de la provincia, lo que conlleva ventajas como es la reducción de costes, el aumento de la capacidad productiva, la mejora de la calidad y la competitividad y, sobre todo, la posibilidad de crear fábricas inteligentes del futuro capaces de adaptarse mejor a las necesidades de los clientes.

El presidente de Ascer, Isidro Zarzoso, que se encargó de abrir la jornada, resaltó las grandes posibilidades que ofrece este nuevo concepto que llevará al sector a afrontar una cuarta revolución industrial para la que las empresas de Castellón están suficientemente preparadas. Tras su intervención y exponerse una visión general de esta industria 4.0, el director de mejora continua y el gerente de operaciones de Colorker, empresa inmersa en esta transformación digital, al que se unió Gustavo Mallol, director del ITC-AICE, detallaron los procedimientos que hay que asumir para este cambio y la necesidad de avanzar en la trazabilidad de los productos en las diferentes fases, en una actividad en la que cobra cada día mayor notoriedad el flujo de datos en la gestión de la actividad, el procesamiento o análisis, entre otros ámbitos de los procesos productivos.