Por segundo año consecutivo, el Ayuntamiento de l’Alcora ha llevado a Cevisama el proyecto de recuperación y puesta en valor de la Real Fábrica del Conde de Aranda. Si el año pasado anunciaron que ya se habían adquirido las dos primeras parcelas de la manufactura condal, ayer, con la compra ya completada (la escritura de la tercera y última de las parcelas se firmó en mayo de 2017), presentaron las primeras actuaciones dentro de este destacado proyecto. Como explicó en su intervención el primer teniente de alcalde y responsable de Patrimonio, Víctor Garcia, «en este tiempo (poco más de un año desde que comenzó a gestarse el proyecto), ya se han dado pasos importantísimos».

La primera intervención va a comenzar de forma inminente, esta misma semana ha sido aprobada la autorización de las obras por la Junta de Gobierno local. Una intervención que asciende a 60.000 euros, financiada íntegramente por la Conselleria de Cultura, y que se centrará en al acondicionamiento de la zona de los hornos. Los trabajos consistirán en la limpieza de la zona, el apuntalamiento de la nave donde están los hornos (2 alturas), la eliminación de elementos añadidos a los hornos en épocas recientes (especialmente en la cámara superior del primer horno, transformado en vestuario de la fábrica BIC) y la reparación de la cubierta de un tramo de la nave de los hornos, con la finalidad de evitar filtraciones de agua.

El objetivo de esta intervención es garantizar la conservación de la nave donde se ubican los hornos, que presenta algunos problemas estructurales.