Las procesiones del Jueves y Viernes Santo congregaron a 14 cofradías y 1.300 cofrades en la Semana Santa de Vinaròs, reconocida como Fiesta de Interés Turístico Autonómico. Los pasos, de gran belleza plástica y algunos con larga historia, desfilaron por la ciudad ante miles de personas.

El jueves, intervinieron cinco grupos de cornetas, bombos y tambores, además de dos bandas de música, la de Vinaròs, cerrando el recorrido; y la de Santa Magdalena de Pulpis, abriéndolo. Es una agrupación dirigida por el vinarocense Sergio Tortajada. En total, salieron a la calle entre capuchinos, costaleros, músicos, penitentes y autoridades 2.000 ciudadanos.

Como ya se hiciera en el 2016, se adelantó el horario de comienzo a las 8.30 horas, es decir, media hora antes de lo que era tradicional. Sin embargo, todas las cofradías partieron desde la plaza Parroquial y no desde dos puntos como el año pasado, con lo que volvió a su tradicional trazado.

Ayer, en lugar de la peana del Nazareno participó la del Santo Sepulcro y ya no intervino el Cristo de la familia Juan. En esta segunda procesión, cantó la coral García Julbe con emoción.