La crisis y el aumento del precio de los abonos de la piscina municipal de Almassora han pasado factura al número de usuarios de las instalaciones. La cifra de tarjetas anuales registra una pérdida de más de la mitad de nadadores de enero del 2011 al mismo mes de este año, pasando de 657 a 282.

Mejores resultados presentan, sin embargo, los abonos mensuales de enero, donde se ha producido un incremento, al crecer de 163 a 258 en el primer mes del año; mientras que los trimestrales también han descendido, de 72 a 57, aunque en menor medida. Así, según confirmaron fuentes municipales, los accesos totales han sufrido una merma, pasando de los 892 de la pasada temporada a los 597 de hoy día.

Desde el consistorio almazorense apuntaron como causas de la reducción de usuarios “la situación económica actual sumada a la revisión de las cuotas aplicada este ejercicio”. No obstante, añadieron que “el Ayuntamiento subvenciona en un 30% las tasas que abona cada usuario por el disfrute de la infraestructura”.

“Está claro que la coyuntura de crisis actual tiene una repercusión directa sobre todo los ámbitos”, señaló el concejal de Deportes, Luis Molina. Además, tal como incidieron las mismas fuentes, “el consistorio se ha visto obligado a revisar el déficit anual del servicio atendiendo a la morosidad y la demora del pago de subvenciones administrativas”.

Por su parte, el PSPV tildó las cifras como “desastre en mayúsculas”. El edil Joan Antoni Trenco remarcó que la caída en el número de pases anuales se debe “al incremento del precio de los abonos y las deficiencias”. H