El colegio Pedro Alcázar de Nules albergó ayer un simbólico y reivindicativo acto de colocación de su primera piedra por parte de padres, alumnos, profesores y representantes municipales dentro del calendario de movilizaciones anunciado recientemente para exigir a la Conselleria de Educación la construcción del centro. No faltó ningún detalle. El Ayuntamiento aportó la urna y la prensa del día mientras los escolares depositaron en el interior un cuaderno, un lápiz y algunas de las cartas que escribieron a la consellera de Educación, María José Catalá, para pedirle la ejecución del centro y describirle cómo les gustaría que fuera. También depositaron un saquito con monedas, aunque, en este caso, de chocolate, “que tienen el mismo valor que las promesas que han hecho hasta ahora”, según destacaron fuentes de la AMPA. Por último, se incluyó un dosier de prensa con cada uno de los compromisos y los incumplimientos que se han ido sucediendo desde el ejercicio 2007.

La urna fue enterrada en el solar anexo al actual colegio que, en el futuro, debería ocupar el nuevo edificio. El presidente de la AMPA, Jesús Matas, recordó que las movilizaciones “seguirán adelante” hasta que tengan “la confirmación de que las obras van a iniciarse”, ya que, hasta el momento, la promesa de la licitación “es eso, una promesa más de las muchas que han hecho y no se han cumplido”, por eso se movilizan, porque esperan “que esta vez no sea así”.

Por su parte, el alcalde de Nules, Mario García, insistió, de nuevo, en que se trata de la reivindicación de “todo un municipio”, no solo de un grupo de padres o un partido político concreto. “En la demanda de este proyecto debemos ir todos juntos, porque defendemos los intereses del conjunto de Nules”, añadió García. H