La residencia y centro de día para personas con diversidad funcional grave que gestiona Afaniad en la Vall d’Uixó presentó ayer el último proyecto de reforma que ha afectado a la Clínica Segarra, un edificio de principios del siglo XX que fue cedido por sus propietarios al Ayuntamiento en el 2008 con el objetivo de que se destinase en exclusiva a fines sociales.

Estos trabajos, que han contado con la financiación de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas y la Fundación ONCE, a través del proyecto Plena Inclusión, han solucionado principalmente los graves problemas de goteras que afectaban a varias zonas, llegando a amenazar la estabilidad de la estructura.

Han destinado un presupuesto que ronda los 52.000 euros, a los que hay que sumar la bonificación del 95% en el impuesto de construcciones aplicado por el Ayuntamiento de la Vall d’Uixó.

FUTURAS MEJORAS / Esta residencia atiende a 32 personas con discapacidad intelectual grave, unas plazas que son adjudicadas públicamente al depender de subvenciones de la Conselleria, de ahí que cuente con residentes de las provincias de Castellón y Valencia. Además, atienden a 10 usuarios más en el centro de día, una capacidad que esperan ampliar en cuanto salga la nueva convocatoria que posibilitaría este proyecto, que no es el único. Como confirma Chus Morales, trabajadora social, desde Afaniad están gestionando la solicitud de ayudas de equipamiento que posibilitará la apertura de la primera vivienda tutelada en la Vall d’Uixó «para promocionar la autonomía de personas con diversidad funcional psíquica que se puedan gestionar con cierto grado de independencia».

La puesta en marcha de estos nuevos servicios dependerá de la apertura de los procesos de concesión de ayudas públicas, de manera que Afaniad gestiona los centros, pero es la Conselleria de Igualdad la que adjudica.