El Ayuntamiento de Alcalà-Alcossebre aprobaba los presupuestos municipales para el 2017 en el transcurso del pleno celebrado anoche. Cuentan con un montante total de 9.890.600 euros y, pese a producirse una bajada en los ingresos que percibe el consistorio, aumentan la cobertura social y las subvenciones, ayudas y bonificaciones para los vecinos, así como el gasto corriente en partidas destinadas a fomento la cultura, iniciativas educativas y acciones turísticas y de promoción económica. La concejala de Hacienda, María Agut, calificó los presupuestos de “tremendamente sociales” y recordó aspectos como “la reducción progresiva de la deuda -que ha pasado del 75 al 17%- o mantener un plazo medio de pago a proveedores muy positivo”. El Ayuntamiento solicitará un préstamo bancario por valor de 250.000 euros que, en palabras de la concejala, “supone pedir menos de lo que devolvemos”.

El capítulo de inversiones asciende a 530.000 euros y como acciones más novedosas se contemplan el programa Cultupeque e iniciativas de fomento de la lectura infantil, un catálogo de asociaciones, un convenio con la Universitat Politécnica de Valencia para rehabilitar el entorno de la ermita de Santa Lucía, el estudio para instalar el carril bici, la construcción de un mirador en el camí L’Atall, la ampliación de la plaza Vista Alegre, la instalación de nuevas duchas adaptadas en playas y piscina municipal, un nuevo Plan contra la Violencia de Género, actuaciones para seguir mejorando la accesibilidad del municipio la ampliación del convenio para el transporte sanitario o la calibración y compra de nuevos desfibriladores. Además, se dota de continuidad a la política de fomento de empleo, con un nuevo Plan de Empleo Local.

Las cuentas municipales quedaban aprobadas con los votos a favor del grupo municipal del Partido Popular, la abstención de Ciutadans y Compromís y el voto en contra del grupo municipal socialista. El portavoz socialista, Joan Ronchera, explicó que “votamos en contra porque no se ha aceptado la totalidad de la enmienda presentada por nuestro grupo”. Por parte de Compromís, Manuel Salvador, aseguró que “estos presupuestos contemplan muchas de las propuestas que les hemos trasladado y van por el buen camino, por lo que no podemos votar en contra, pero nos mantendremos vigilantes para que se cumplan”. El portavoz de Ciutadans, Joaquin Zaragozà, también optó por la abstención ya que “estos presupuestos se merecen un voto de confianza”.

La redacción de los presupuestos ha contado con la participación de los grupos municipales de la oposición, contemplando la mayor parte de las propuestas presentadas, así como de colectivos y vecinos y, tal y como recordó la concejala de Hacienda “se han mantenido numerosas reuniones con los grupos municipales, buscando el consenso”.

El Alcalde, Francisco Juan, destacó que “a la hora de realizar los presupuestos, intentamos que sean útiles y que den soluciones a los vecinos. Al mismo tiempo, mantenemos un modelo de gestión eficiente y responsable que nos ha permitido obtener una economía saneada y con gasto controlado que nos permite seguir asumiendo retos como el impulso del empleo, profundizar en políticas sociales o apoyar a los colectivos”.