La temporada veraniega del 2017 fue complicada en la zona de Las Fuentes de Alcossebre. Durante unos días, las analíticas adversas obligaron a la prohibición del baño y a poner en marcha un dispositivo para paliar las incidencias localizadas en una de las surgencias naturales de agua que desembocan en el mar.

Para dar una solución definitiva, esta parte del término de Alcalà es objeto de obras de mejora en la red de saneamiento, con el fin de evitar fugas y afectar a la costa. Una medida que cuenta con una ayuda económica de 50.000 euros, anunciada por el presidente de la Diputación, Javier Moliner. «Tenemos que arrimar el hombro, porque las playas de Alcossebre son fuente de progreso, y lo mínimo que podíamos hacer es dar apoyo desde el minuto uno», explicó en una visita a la zona, acompañado por el alcalde, Francisco Juan, junto a miembros de la corporación local.

MEDIDAS CONTINUAS / El primer edil destacó que desde el momento en que se supo del primer resultado negativo «no hemos parado de trabajar, con actuaciones necesarias, como los continuos controles de vertidos, en las que hemos contado con la colaboración de la administración provincial; todo ello con la vocación de seguir siendo un destino turístico de primer nivel».

La empresa Facsa es la encargada de desarrollar las obras, para finalizar en los primeros días de junio. Además, está previsto que una actuación adicional, por parte de la Generalitat, arranque la próxima semana, y que complementa el operativo actual.

Las actuales inversiones buscan suprimir factores de riesgo, derivados de la antigüedad de las redes de evacuación en este entorno. De forma paralela, se ha hecho un llamamiento a los responsables de propiedades particulares, para que revisen sus salidas de saneamiento. Tras la pesadilla de la anterior campaña, esperan que la situación recupere la deseada normalidad.