El Ayuntamiento de Almassora destinará 1,4 millones del presupuesto del 2015 a diversas partidas para inversiones. Así lo adelantó ayer el alcalde, Vicente Casanova, a falta del cierre del expediente que se está llevando a cabo en estos momentos.

Con este importe se culminarán proyectos iniciados este ejercicio, como es el caso del cementerio o la estación de bombeo de Vora Riu, así como otras acciones que, “aunque son de menor calado, esperamos que tengan un impacto positivo en la población”, explicó. Casanova resaltó que, si bien 1,4 millones irán destinados a actuaciones, “la mayor inversión será la que pongamos en los bolsillos de los contribuyentes”.

Así hizo referencia a los 2,3 millones que ahorrarán los vecinos en el impuesto de bienes inmuebles (IBI) al producirse una bajada del 24,4 % en el recibo. A esta cuantía se sumará la reducción de 175.000 euros en el impuesto de vehículos, que serán asumidos por las arcas municipales.

El primer edil almazorense aseguró que la bajada de ambos impuestos es posible gracias “al gran esfuerzo que ha hecho el consistorio en reducir el gasto corriente”. Al respecto, apuntó que, desde el 2008 al 2013 se han conseguido rebajar cuatro millones de euros en este apartado.

Casanova avanzó que está previsto que el consistorio concluya el presente 2014 con una deuda del 30%, que se traduciría en 7.300.000 euros. Se trata de una cuantía que pretenden descender hasta los 6,6 millones a final del 2015. Además, también explicó que se espera obtener un remanente de tesorería entorno a los cinco millones de euros procedentes del presente ejercicio. “Creemos que, tal y como sucedió el año pasado, también alcanzará una cifra importante”, afirmó.

FONDO DE CONTINGENCIA // De este modo, la particularidad del presupuesto del 2015 es que se abrirá un fondo de contigencias de 1,8 millones que les permitirá hacerse “cargo de asumir otras inversiones o gastos a lo largo del próximo ejercicio”, matizó. H