Los operarios de la empresa de control de plagas contratada por el Ayuntamiento de Almassora han iniciado las prospecciones de larvas de mosquitos para evitar que los insectos se desarrollen una vez finalizada la temporada de frío. Tal como anunció el mes pasado la concejala de Medio Ambiente, María José Tormo, con la llegada del nuevo año, el departamento ha activado el cronograma de trabajo que minimizará el desarrollo de los mosquitos.

Los técnicos han recorrido desde primera hora de la mañana las inmediaciones del paraje de Santa Quitèria, así como los humedales de la playa de Almassora. En concreto, se han acercado hasta acequias y charcas en el entorno de la avenida Meridià, la Mitgera, Benafelí y el tramo subterráneo del camino Om Blanc, entre otros, para evaluar la aparición de larvas pese a las bajas temperaturas.

Esta primera revisión se ha centrado en el agua acumulada tras las últimas lluvias en espacios con escaso drenaje, como las zonas de menor desnivel respecto al nivel del mar. La lluvia estancada podría convertirse en foco de criadero de larvas con una subida de las temperaturas, por lo que han sacado muestras de agua para inspeccionar una posible aparición de mosquitos antes de iniciar el tratamiento químico.

“Pese a que el frío nos hace pensar que no es momento de que aparezcan mosquitos, sabemos que la prevención es el mejor remedio para controlar nuevos focos y evitar el riesgo que supone dejar hasta última hora los tratamientos”, ha declarado la edil de Medio Ambiente. Esta parte ha recordado que el Ayuntamiento de Almassora destinará este año más de 21.000 euros, entre el calendario cerrado y las jornadas extraordinarias, a la lucha contra los insectos para mantener los buenos resultados de la última campaña.

Según el cronograma que sigue la empresa, el tratamiento más agresivo se concentrará entre los meses de mayo y septiembre con varias inspecciones semanales a los puntos del casco urbano, la playa y Santa Quitèria que sufren una mayor incidencia de la plaga. Hasta la llegada de la primavera, la empresa mantendrá un control rutinario para detectar focos y atajar los insectos con tratamientos larvicidas dado que las condiciones meteorológicas pueden ser determinantes en la evolución de la plaga.