La alcaldesa, Susanna Nicolau; la concejala de Playas, Amaya Gómez; y el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Francisco Toledo, acordaron ayer reunirse con la empresa BP a fin de plantear la posible apertura del Camí de Voramar para bicicletas y peatones. El proyecto planteado por el consistorio supone la ampliación de algunos tramos y desplazar la valla que bloquea el paso, para lo que es necesario implicar a la empresa al estar los terrenos en los limites de su propiedad.

La alcaldesa recordó que se trata de una “reivindicación histórica para recuperar un paso tradicionalmente utilizado por vecinos de Almassora y el Grao”. Gómez aseguró que “mejoraría las conexiones de la playa y la creación de un nuevo carril bici, muy necesario”. H