La Policía Local de Almassora ha editado una treintena de rótulos que repartirá entre los vecinos de la vila que tienen barrotes o burladeros en sus viviendas. Se trata de un letrero fluorescente con el mensaje «puerta cerrada» bien visible para que lo exhiban los propietarios en caso de cerrar las puertas. El objetivo es que los corredores no confundan las barreras con un acceso en caso de que la vivienda esté cerrada.
La Concejalía de Fiestas, a cargo de Isladis Falcó, ha reeditado la carta que envió a los residentes de la vila en la última edición para solicitarles su colaboración en las medidas de seguridad implantadas para proteger a los corredores. «Este cartel apenas tiene coste y puede ser determinante para disuadir al aficionado de buscar cobijo en una vivienda que está cerrada», indicó.
Además, un arquitecto recorrerá el casco antiguo antes del inicio de los festejos populares para comprobar que los elementos de seguridad se ajustan al reglamento de festejos taurinos tradicionales de la Comunitat.
Es el caso de los barrotes ubicados en el umbral de la puerta, ya sea alineados o enrasados a la fachada del inmueble, que a menudo dejan a ciegas la puerta si los propietarios se marchan.
De hecho, vecinos, peñistas y operarios trabajan ya para instalar todas las protecciones y cadafals en el recinto taurino. Uno de los actos más peligrosos de la semana taurina es el encierro y desencierro del próximo sábado, a las 11.00 horas, con toros de Germán Vidal. En este caso, el dispositivo de seguridad será idéntico al de mayo, donde la popular carrera con ganado de corro concluyó sin incidentes.
control // La Policía Local peinará con dos patrullas las calles San Joaquín y San Vicente antes del encierro y en los minutos previos se situará tras la barrera para asegurarse de que ningún menor de 16 años ni las personas con las condiciones físicas o mentales mermadas accede al recinto. Por su parte, dos ambulancias y el equipo sanitario de la enfermería velarán por la integridad de los posibles heridos. H
