Almassora se puso a los pies de los bous per la vila. Una muestra de amor que no fue la única en la primera tarde taurina de Santa Quiteria. Y es que la arena de la plaza Mayor fue testigo de una petición de matrimonio entre dos aficionados. Minutos después, el Gerardo Ortega que este año abrió como Bou del Poble. Raúl Robles templó a Catalán, un guiño a la libertad taurina, al que también saludaron Palacios, Borja e incluso el veterano Córdoba.

La reina, Paula Muñoz, y sus damas presidieron la suelta del segundo de la tarde, un ejemplar de Peñas Blancas, en La Picaora. A Cantinero II, financiado por la ACT La Picaora, lo templaron al alimón Julián Marín y Rafa Lorite.

En la misma plaza basó la mayor parte de su actuación el tercero, otro de Peñas Blancas que aportó Aficionats al Bou como sustituto del Guadalest anunciado. Con él volvió a desplegar Patricio su chaqueta antes de que se fuera a las calles de la Vila. H