Con el objetivo de acabar con el problema de goteras, el Ayuntamiento de l’Alcora desarrolló labores de reparación de la cubierta del centro de jubilados y pensionistas Conde de Aranda.
Las obras, ejecutadas con un presupuesto de 43.900 euros, comenzaron con la demolición de los pavimentos de baldosa cerámica y de las jardineras existentes. A continuación, se procedió a la apertura longitudinal del suelo y su sellado con mortero de cemento hidrofugado y al picado de y levantado de sumidero. Tras estos trabajos previos, se llevó a cabo la nueva impermeabilización del techo del edificio.
Además de subsanar las deficiencias que presentaba, con este proyecto también se ha ganado espacio para los diferentes actos que se realizan en la Pista Jardín, al quitar los elementos de hormigón que separaban este recinto del hogar de jubilados.
Junto a esta actuación, el concejal de Tercera Edad, Agustín Chiva, recuerda que este verano se impulsó la mejora de las instalaciones y equipamiento de la cocina del centro social de la asociación de jubilados y pensionistas l’Alcalatén, con la finalidad de mejorar los servicios que se ofrecen desde el mismo. Previamente se arregló el salón, la entrada o la primera planta del inmueble.
«A través de todos estos proyectos estamos dando respuesta a las demandas de los usuarios que utilizan estos centros», concluyó el representante municipal.
