El número de quejas por molestias de casals en Almassora ha aumentado un 36% en un año. Según se desprende de la memoria de la Policía Local --que pasó el lunes por pleno--, se ha producido una subida, al pasar de 206 quejas durante el 2015 a 322 en el 2016, es decir, 116 denuncias más.

En este sentido, y como recoge el estudio del cuerpo de seguridad, esto se debe al nuevo modo de ocio de los jóvenes, que los utilizan a diario como centro de reunión, frente al periodo acotado de las semanas de fiestas, en mayo y en octubre, como ocurría antes. De hecho, fuentes del consistorio aseguran que «los picos de molestias que más despuntan se registraron fuera de los meses propios de las celebraciones».

La tendencia, sin embargo, es negativa en bares y pubs. Así, se redujeron las quejas en el entorno de estos establecimientos, que pasaron de 201 en el 2015 a 125 en el 2016, «como consecuencia del traslado de los centros de reunión a los casals», detallan las mismas fuentes. Esta parte también ha incidido en que estas denuncias por molestias no se limitan solo a la Vila, sino que abarcan a otros puntos de la ciudad.

MENOS QUEJAS PERROS / Por otra parte, también han descendido en un 19,43% las protestas derivadas de la tenencia de perros en el ámbito doméstico, lo que supone pasar de 242 a 195. A pesar de ello, las denuncias por infringir la ordenanza municipal en el ámbito de la tenencia de animales domésticos copan más de la mitad del total de expedientes abiertos el pasado ejercicio.

Tal como figura en la memoria de la Policía Local, estas multas por vulnerar cualquiera de las ordenanzas municipales han pasado de 94 a 85. Sin embargo, 47 de éstas están vinculadas a malas prácticas en el cuidado de los canes. El resto, infringen la ordenanza de convivencia ciudadana (24), la de vertidos (6), publicidad en buzones (4) y la residuos urbanos y ornato público (4).