Técnicos de la compañía de aguas Sorea están inspeccionando esta semana parte de la red de abastecimiento de agua de Benicarló con un nuevo sistema de detección de fugas, que se basa en inyecciones de gas helio. Tradicionalmente, los sistemas de investigación consistían en la detección acústica del sonido que emite el agua en caso de fuga.

El helio pasa rápidamente a la atmósfera y se detecta a través de sensores específicos. La concentración de helio al aire es muy constante, por tanto, la captación de concentraciones más elevadas determina el punto del escape. El equipo de detección, diseñado para ser utilizado y transportado de forma autónoma por un único operario, permite una búsqueda muy efectiva sin tener que interrumpir el servicio de abastecimiento de agua y, además, no perjudica a los elementos de la conducción.

El helio es un gas inocuo para el consumo humano y no altera las propiedades del agua. El sistema empleado genera una mejora en la agilidad de detección de las fugas y llega casi al 100% de las incidencias. En consecuencia, se produce una reducción del impacto medioambiental, gracias a la disminución de las pérdidas en la red. H