Benicàssim afianza cada vez más su marca de Ciudad de Festivales. Por ello, el Ayuntamiento mediará entre los tres grandes certámenes internacionales que se celebrarán este verano para mejorar la coordinación de los mismos y planificar el montaje y desmontaje de sus infraestructuras para lograr mayor eficiencia y reducir costes, ya que solo separan varias semanas de cada cita y todos se realizarán en el recinto de conciertos.

La localidad calienta motores para el estreno del nuevo certamen heavy Costa de Fuego y continúa con la ronda de contactos con sus organizadores, la empresa Maraworld (la misma del FIB), para abordar todos los detalles de la cita musical que acogerá el municipio los próximos 20 y 21 de julio, tras la celebración del FIB y antes de la convocatoria del tercer Rototom Sunsplash.

La alcaldesa, Susana Marqués, se reunirá con los responsables de la organización del evento, junto a la concejala de Festivales, Carolina San Miguel, y la Fundación de Festivales, este martes en la casa consistorial benicense para ultimar todos los preparativos. La primera edil confía en que Costa de Fuego será un auténtico éxito, ya que quien ha lanzado el certamen “es una empresa solvente y con una experiencia dilatada que nos garantiza que será un festival de élite”. Y, tras el encuentro con Maraworld, los responsables municipales mantendrán otra reunión con los organizadores del Rototom Sunsplash para fijar el calendario de trabajo a seguir y promover el mantenimiento de algunas instalaciones fijas y comunes de todos los festivales.

El FIB del heavy -como han bautizado ya algunos el nuevo evento-- atraerá hasta la localidad a cerca de 25.000 personas, según se prevé, supondrá un impacto económico aproximado de más de dos millones de euros y “dinamizará el destino turístico de Benicàssim”, remarcó. H