El Ayuntamiento de Benicàssim reclamó ayer a la Generalitat las inversiones pendientes por ejecutar en el municipio. Al respecto, pusieron como ejemplos el proyecto de la carretera la Ratlla, la canalización del barranco de la Parreta, la declaración del humedal para su recuperación y puesta en valor, la deuda de 118.000 euros de Villa Elisa, así como la finalización de las obras del centro especial de asistencia al mayor (Ceam), tal y como explica la alcaldesa, Susana Marqués.

Fue en el transcurso de un pleno en el que se aprobó por unanimidad una moción de Compromís que exigía al Gobierno de España las intervenciones no ejecutadas en el 2017, como la llegada de los Cercanías o la demanda a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) de la financiación para sufragar una parte de las actuaciones de construcción del puente sobre el barranco de Farja, las cuales ya están en marcha. El escrito no dejó pasar tampoco por alto la liberación de la AP-7.

MOCIÓN INSTITUCIONAL // Este punto del orden del día de la sesión plenaria fue abordado finalmente como una moción institucional, ya que fue consensuada por parte del equipo de gobierno y todos los grupos políticos.

El acuerdo fue a sugerencia del Partido Popular, a través de una enmienda de adición a la propuesta, en la que se incluyeron las reclamaciones al Consell. Un documento que se enviará ahora a las dos instituciones.